martes, febrero 27, 2007

Ave César, morituri te salutant*

* salve César, los que van a morir te saludan

(...) somos como esos sillones que se acostumbran a la forma del que los usa regularmente, y cuando se sienta otra persona ya no encaja, no se corresponde con el bajorrelieve que se formó. Y lleva mucho tiempo eso.
Conexion... Desconexion... es endiabladamente entramado todo esto. ¿Hacia dónde Capitán? ¿Capitán?... flotar, flotar, sin rumbo, vagar en lugares conocidos con desconfianza; de repente se volvieron extraños. Saltar de la rutina a la incertidumbre; flotar, flotar. Control remoto del aire acondicionado, del equipo de música, de la tele, de la video... y el de la vida? Ay!! Se quedó sin pilas!! (y de esas no se consiguen asi nomás!).
Y de repente, te agachás a mojarte la cara en un estanque y te das cuenta de que vos sos el Capitán, y que tenés el control remoto y las pilas en la mano, y vos decidís. La gorra de capitán pareciera ser de plomo. Pesa, y mucho. El botón power para apagar la tele se convirtió en el pulgar del César... con solo bajarlo, rodará alguna cabeza. Power = poder, poder de elección: mucho poder, cierto? La muchedumbre grita con euforia, los leones se relamen, los gladiadores miran expectantes y piensan "que absurdo, de un simple dedo de la mano de un hombre dependen nuestras vidas". El César lo sabe, y lo entiende igual de absurdo. Pero el tiene el control en la mano... o en el dedo. (que alguien calle a este hombre!!)
Puff perdón por el divague!!
(...)

¿hay veces que me canso de ser hombre?
(...)

El circo romano espera!! La función debe seguir.

2 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Que bueno q volviste a escribir Mati!!! Ya lo estaba extrañando!!
Simplemente me encanto!! Para qué mas palabras??

Y el libro cuando llega??

7:49 p. m.  
Blogger Jimena Gale said...

capitan, baje el pulgar... si esta flotando ya no necesita sillón.

3:59 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home